30 Sep ¿Qué es un administrador de empresas y cuáles son sus funciones principales?
El administrador de empresas es una figura indispensable para cualquier compañía, ya sea de mayor o menor tamaño, que quiera asegurarse de alcanzar sus objetivos. El problema es que tiende a confundirse con otros actores dentro de las empresas que, si bien pueden llegar a presentar ciertas similitudes, no tienen demasiado que ver con ello. Si quieres saber exactamente qué es esta figura y la importancia para la empresa, no dejes de leernos porque a continuación te vamos a enseñar todo sobre la misma.
¿Qué es un administrador de empresas?
Se puede definir al administrador de una empresa como una figura esencial en la organización, cuya principal labor es conseguir que la compañía cumpla holgadamente con sus objetivos. Estos pueden ser de carácter trimestral, anual (marcados al inicio de cada ejercicio) o incluso más a largo plazo, dependerá de la naturaleza y las inquietudes de la compañía en cuestión.
Contar con un profesional que se ocupe de este trabajo marca la diferencia entre las empresas eficientes y las que no lo son. Esto se debe a que el administrador de empresas es el responsable de hacer que todo funcione como debe y, más importante aún, que lo haga dentro de unos márgenes establecidos.
Responsabilidades del administrador de empresas
Las responsabilidades del administrador de una empresa podrían agruparse con sus funciones, aunque es mejor diferenciarlas.
La primera responsabilidad, la más visible (literalmente), es que el administrador es el representante físico de la empresa. A pesar de que esta sea una persona jurídica, siempre hay que delegar esta labor en una persona física, que es quien debe tomar las riendas en las relaciones y las negociaciones propias de la actividad empresarial.
A su vez, esta figura es también la responsable de que todo se produzca como debe, o lo que es lo mismo, de que se cumplan todas las leyes dentro de la organización.
Funciones que cumple un administrador de empresas
Cuando se busca un administrador para una empresa, lo primero en lo que se piensa en que en dicha persona debe ser un líder. Sin embargo, no basta con la actitud, también hay que contar con unas capacidades muy específicas que permitan a este profesional cumplir con todas las funciones que se esperan de él, las cuales son las siguientes:
- Planificación: es una función esencial. Por muy capaz que sea una persona para cumplir el papel que se le quiere encomendar, en el mundo empresarial no hay lugar para la improvisación. Sí, es importante que el administrador de una empresa sepa cómo reaccionar ante un imprevisto, pero como se dice, no hay mejor imprevisto que el que ya estaba previsto de antemano.
- Organización: para que la planificación sea efectiva, el administrador debe ser organizado. La buena distribución de los recursos económicos y el del trabajo depende de este elemento, por lo que la elección de la persona adecuada es vital para la buena marcha del proyecto.
- Además de la organización y la planificación, otras de las funciones indispensables del administrador de una empresa es su papel en las labores de control. De nada serviría marcar una estrategia de funcionamiento si después no se monitoriza que los empleados estén siguiéndola a la perfección y que esta se vea reflejada en la consecución de los objetivos económicos marcados.
Diferencias entre un administrador, un gerente y un socio
Uno de los detalles más importantes a la hora de decidirte a incorporar un administrador a tu empresa es saber exactamente qué diferencias entre este especialista y, por ejemplo, un gerente o incluso un socio.
El administrador se puede decir que es «el director de la orquesta». Es la pieza que tiene que hacer que todo funcione. Por eso debe saber desde cómo hacer una nómina a tus trabajadores hasta cómo analizar el estado financiero de tu negocio. Es el encargado de que todo funcione dentro de la viabilidad que se haya planteado.
El gerente es el máximo responsable de una empresa, pero no por ello tiene por qué saber cómo se administra. A lo que sí está obligado es a responder legalmente a las acciones de la compañía.
El socio es una empresa que es propietaria en parte de la compañía y que, por ello, recibe beneficios periódicamente. Al igual que el gerente, no tiene por qué saber administrar, aunque de tener conocimientos, también podría ejercer como administrador de la empresa adquiriendo, por descontado, todas sus funciones y responsabilidades.
En las empresas, cuanto más se sepa hacer, mejor. También depende, claro está, del grado de implicación que se esté dispuesto a tener. De poco sirve tener un buen gerente o multitud de socios, sin una figura como la del administrador de empresas que se esmere en que todos ellos ganen dinero.
¿Qué posiciones puede ocupar un administrador de empresas y cuánto puede ganar?
Un aspecto que querrás saber es qué tipo de posiciones puede ocupar un administrador de empresas en la compañía como cuantificar la inversión que deberá hacer tu compañía en este tipo de profesional.
Si algo bueno tiene un administrador es que se trata de un profesional altamente capacitado para afrontar las diferentes problemáticas desde multitud de puntos de vista. De ahí que se pueda ocupar con plenas garantías distintos puestos, desde director general hasta director financiero, pasando por responsable de adquisiciones o incluso jefe de varios departamentos.
Su remuneración va a depender del grado de responsabilidad que se decida delegar en él. Lo habitual es que un administrador de empresas reciba un sueldo superior a los 50.000 euros al año, siendo el tope el que la organización considere en función de la valía del profesional al que quiera retener en su nómina de trabajadores.